Uno de los grandes retos del nuevo gobierno consiste en mantener el sistema de pensiones o buscar soluciones para su sostenibilidad. En los últimos meses ha aparecido en nuestro día a día una nueva expresión que es “La hucha de las pensiones”. En este artículo vamos a intentar clarificar en que consiste la hucha de las pensiones y cuál ha sido su evolución desde su creación.
¿Qué es la hucha de las pensiones?
El Fondo de Reserva de la Seguridad Social o hucha de las pensiones surge de la necesidad de establecer fondos especiales de estabilización y reserva destinadas a atender las necesidades futuras en materia de prestaciones contributivas originadas por desviaciones entre ingresos y gastos de la Seguridad Social. Se alimenta, por tanto, del superávit de la Seguridad Social y fue creado con el objetivo de constituir reservas que permitan atenuar los efectos de los ciclos económicos bajos y garantizar el equilibrio financiero del sistema de pensiones. Su creación en el año 2000, se llevó a cabo en cumplimiento de la recomendación número dos del Pacto de Toledo, firmado por todas las fuerzas parlamentarias.
¿Qué ha pasado con la hucha de las pensiones?
La evolución desde el ejercicio 2012 es que se ha dejado de ingresar en la hucha de las pensiones debido a que con el dinero que se ha recibido de la Tesorería de la Seguridad Social no ha sido suficiente para poder pagar las pensiones y además se han tenido que usar recursos para pagar parte de las pensiones y para financiar otras partidas presupuestarias.
¿Qué supone que se acabe la hucha de las pensiones?
Si se agota la hucha, eso no significa que se acabe el dinero para pagar las pensiones. Y, desde luego, no implica la quiebra del sistema, aunque sí que exista un problema para afrontar el déficit a largo plazo. No hay peligro de quiebra inminente porque la Seguridad Social recauda unos 8.400 millones de euros al mes solo en cotizaciones, aproximadamente lo que cuesta la nómina mensual. Ahora tan sólo sufre problemas de liquidez cuando llegan las pagas extra. Y eso solo ocurre en junio y diciembre. Así que a corto y medio plazo esas dos mensualidades se pueden financiar sin demasiadas dificultades. En lugar de tomarlo del Fondo de Reserva, el Estado podría acudir a los mercados para conseguir el dinero. Por dar una idea, únicamente habría que financiar unos 18.000 millones al año, relativamente poca cosa en comparación con los 250.000 millones que hay que refinanciar cada año de la deuda española. Mientras siga la confianza en España, el Estado podrá recurrir a los inversores y no habrá problemas para sufragar las pagas extra, insisten fuentes de la Seguridad Social.
¿Qué medidas se pueden tomar para mantener el sistema de pensiones?
Queda claro que en el medio plazo no debe haber problema para que nuestros pensionistas reciban sus retribuciones mensuales como hemos analizado en el punto anterior. Pero lo que no tenemos tan claro es que ocurrirá en el largo plazo.
Siendo conscientes de que el aumento de la esperanza de vida y la baja natalidad en nuestro país provoca un desajuste en el cual los ingresos recibidos de las cotizaciones son inferiores a los gastos que tiene que hacer frente la seguridad social para pagar a todos nuestros pensionistas.
Los partidos políticos sostienen distintos puntos de vista para solucionar este problema. Algunos defienden que mediante el crecimiento económico se ajustará dicho problema y se podrán pagar todas las pensiones y otros partidos reconocen que se deben aumentar o crear impuestos diferentes a las cotizaciones actuales para poder mantener este sistema.
Un punto intermedio y una medida que se podría tomar en el corto plazo para evitar mayores desajustes en el futuro, sería diferenciar las pensiones contributivas de las no contributivas, es decir, las pensiones contributivas se debería seguir cubriendo mediantes las cotizaciones como se hace actualmente y las no contributivas deberían ser financiadas por otros impuestos. En los presupuestos generales cada año se debería tener en cuenta una partida que cubriera las pensiones no contributivas.
Una de las cosas que nos gustaría dejar claro con este artículo es que no debemos temer que por que se consuma la hucha de las pensiones, los pensionistas de nuestro país puedan ver recortadas sus retribuciones mensuales en los próximos años. Pero si debemos ser conscientes de la importancia de que el gobierno presente y los futuros gobiernos de nuestro país deben llevar este debate al parlamente para buscar soluciones lo antes posible para poder mantener el sistema actual de pensiones en el futuro.
Jesús Blazquez Barbancho
Asesor Fiscal
Lex Consulting Abogados